Montevideo.— ( AGENCIALAVOZ.COM ) Mientras la campaña electoral para la segunda vuelta en Uruguay ya entró en su recta final, el derecho al aborto se transformó en el gran tema que marca a fuego las diferencias entre los dos candidatos.

El oficialista José "Pepe" Mujica y el centroderechista Luis Alberto Lacalle competirán en el ballottage de este domingo, en el cual dos modelos muy distintos de país están en juego.
Mujica, de 74 años, abanderado del Frente Amplio, es favorito en las encuestas para imponerse a Lacalle, de 68 años, del conservador Partido Nacional, y ambos queman los últimos cartuchos buscando el favor del electorado.
El año pasado se desató una polémica en Uruguay cuando una mayoría legislativa del Frente Amplio sancionó una Ley de Salud Reproductiva que incluía despenalizar el aborto. Esto originó un duro choque con el presidente Vázquez, que finalmente lo vetó.
Sin embargo, la senadora Mónica Xavier, también socialista, ha repetido que en la nueva legislatura a instalarse el 1º de marzo, el tema se pondrá de nuevo a consideración, y Mujica ya anticipó que no lo vetará.
Lacalle, un católico practicante, se opone tenazmente a legalizar el aborto. Mediante una campaña de avisos televisivos, una Coordinadora Nacional por la Vida convocó a "elegir un presidente que respete el derecho a la vida". La Iglesia Católica declaró que comparte el concepto.
Otro punto que enfrenta fuertemente a los candidatos es cómo combatir la delincuencia. Lacalle dijo que, de llegar al gobierno, reprimirá más fuertemente a los delincuentes, sin apartarse de las normas legales, y consideró que en este campo el gobierno ha fracasado.
Entre las propuestas del Partido Nacional se incluyen la reducción de la edad de imputabilidad de los menores y mayores penas para los delincuentes reincidentes.
El Frente Amplio, en cambio, sostiene que hay que trabajar sobre las causas de la delincuencia como la pobreza y la marginación social.