La iniciativa propone la posibilidad de efectuar abortos sin restricciones hasta la semana de embarazo número 14, pero una cláusula que permitiría a las adolescentes realizarse este procedimiento sin el consentimiento de los padres había generado gran oposición entre los conservadores. Pero pese al cambio, las adolescentes aún podrán poner fin a un embarazo sin permiso de sus padres, dijo Carmen Montón, portavoz de asuntos femeninos para el gobernante Partido Socialista. Montón celebró el acuerdo y dijo que lo más importante es que las mujeres sean las que decidan. El partido vasco indicó que ahora respaldará la medida. La enmienda dice además que las adolescentes que puedan demostrar que informar a un familiar pudiera traerles graves consecuencias pueden quedar exentas de esa obligación. De acuerdo con la ley existente, el aborto era permitido en casos de violación, deformación fetal o si los médicos consideraban que el embarazo ponía en peligro la salud de la madre. La mayoría de los 100 mil abortos anuales en España se realizan bajo esa cláusula. Las mujeres que se sometían a abortos fuera de esos parámetros legales podían ser enjuiciadas, aunque eso es extremadamente inusual. La iniciativa de ley cuenta con el apoyo de varios partidos, pero eran necesarios los votos de seis diputados vascos para su aprobación en el Parlamento. El mayor rechazo a la ley proviene del conservador Partido Popular, la mayor agrupación opositora española, que tiene 153 escaños de los 350 de la cámara baja. Los socialistas dicen que están buscando el mayor consenso posible en apoyo a la medida.