Señala que "la Clínica de la Mujer será un espacio para el cuidado integral de la salud de las mujeres, donde se priorizarán tres líneas de trabajo que son: la salud sexual y reproductiva y los problemas ginecológicos que de ella se derivan, la atención de casos de violencia basada en el género y la salud mental asociada a la condición de género".
Salazar utiliza los términos propios del feminismo, tales como "salud sexual y reproductiva", "derechos sexuales", "condición de género", etc.; que implican que la Clínica de la Mujer se dedicará exclusivamente a la promoción del aborto, la contracepción y la ideología feminista; y servirá además; según explica el mismo Alcalde en su correo, como "centro de coordinación" para articular y difundir la ideología feminista en contra de la vida y la familia.
En efecto, la lista de "servicios" que Salazar Jaramillo ofrece en su correo electrónico incluye:
"Difusión de los derechos humanos con énfasis en los derechos sexuales y reproductivos".
"Información y formación en salud sexual y reproductiva".
"Educación para el ejercicio de una sexualidad libre, responsable, placentera y segura".
"Uso de métodos de anticoncepción para prevenir embarazos no deseados".
"Proyecto de Formadoras-es en Salud Sexual y Reproductiva".
"Interrupción voluntaria del embarazo (aborto) en los casos contemplados por la ley".
"Tratamiento del aborto incompleto".
"Curetaje y legrado".
"Tubectomía" (nombre técnico para la contracepción irreversible mediante "ligadura" de trompas).
Debido a que el centro de más de ocho millones de dólares se dedicará exclusivamente a la promoción del aborto, la contracepción y la visión sexualizada del feminismo –que administrará el local–, las organizaciones de defensa de la vida de Antioquia insisten en exponer al Alcalde su total oposición al uso de fondos públicos para el seguimiento de una agenda ideológica específica que no contribuirá a la salud de la mujeres.