Por Hna Dorothy de Saénz


NIGERIA-. ( AGENCIALAVOZ.COM) Massachusetts, una de las trece colonias británicas secesionistas que dieron origen a los EEUU; un Estado que alberga a la Universidad de Harvard y el Instituto Tecnológico (MIT), ambos de prestigio y fama mundial; un Estado de fuerte influencia católica por la inmigración irlandesa, con su capital, Boston, tenida por una de las más exquisitamente civilizadas del país.

Y, ¿qué es lo que ha ocurrido en Massachusetts? Esto: en 2005, David y Tonia Parker comprobaron, sorprendidos, que a su hijo Jacob le estaban enseñando en el colegio público que el matrimonio homosexual es una opción moralmente equiparable al heterosexual, puesto que ha sido legalizado. Jacob tenía entonces 5 años, y esto venía en un libro titulado ¿Qué es una familia? en una “bolsa de publicaciones sobre la diversidad” que daban a los alumnos de educación infantil. El matrimonio se sintió indignado y ofendido. David Parker fue al colegio a protestar porque nadie les había informado de que iban a suplantar a los padres en la formación moral de su hijo. La respuesta fue que, al haber sido legalizado en Massachusetts el matrimonio homosexual, cualquier adulto podía comentar con los alumnos estas cuestiones sin tener que informar previamente a los padres. Entonces, los Parker argumentaron de otro modo: lo que explicaban a David en el colegio constituía una agresión contra su libertad de religión, que es la cristiana.

Y como quiera que no obtuvo más que la reafirmación de la dirección del colegio en su posición, Parker dijo que no se movería de allí hasta obtener una explicación satisfactoria a su reclamación. Se movió, claro; pero no a su casa, sino conducido a la cárcel por la policía, que fue avisada por el colegio. Los Parker pleitearon contra la escuela, y perdieron el juicio: el juez determinó que, una vez legalizado el matrimonio entre personas del mismo sexo, en Massachusetts se puede enseñar a los alumnos, desde Primaria, que este tipo de unión es moralmente tan aceptable como el heterosexual. Ocurrió en Massachusetts. Pero cualquier día podría ocurrir en España una cosa igual o muy parecida. Vayamos tomando nota, porque la situación es perfectamente superponible, y más aún después de la sentencia del TS declarando ilegal la objeción de conciencia en los casos que juzgó en relación con la EpC. Ya empezamos a ver cómo los poderes públicos se ciscan impunemente en la obligación que esa sentencia les impone de no adoctrinar a los menores. Lo siguiente, si persiste la oposición de los padres a que la escuela corrompa el sentido moral de sus hijos, serán multas, embargos, destrozo de las familias resistentes y, quizás la cárcel, cosa que tratarán de evitar, porque sería demasiado impopular.

Nuestra querida Hna. Dorothy nacio en España, es Directora Ejecutiva Ministerio Oración Internacional, dirige una agencias misioneras en África, la India y China