Desde la sede de Acción Democrática en Caracas, Ledezma respondió a las amenazas del mandatario y anunció que la sociedad democrática se declaraba en estado de alerta "en defensa de la libertad de expresión". Asimismo dijo que a partir de ese instante los venezolanos contarían con la unión de todos los sectores políticos y civiles del país. "Este es un pueblo que ha vencido muchas dificultades", añadió.
"El Gobierno cree que si se cierran los medios de comunicación no tenemos informaciones terribles como los 278 homicidios que se produjeron la semana pasada", señaló, y rechazó el calificativo de "golpista" que le endosó el mandatario venezolano a la oposición. En ese sentido Ledezma adelantó que, en adelante, no llamarán a Chávez presidente sino "golpista", porque fue en 1992 cuando encabezó una intentona contra un Gobierno legítimamente electo y porque con estas declaraciones y otros hechos ha propinado golpes a la Constitución.
Ledezma aseguró que el mandatario criminaliza a quienes discrepan con el Gobierno socialista y recordó que "el pasado 23 de noviembre se demostró que también se pueden vencer los abusos y el autoritarismo". "Nada ni nadie nos va a separar del camino constitucional (. . . )". Lo que queremos es paz", prosigió en declaraciones recogidas por el diario 'El Nacional', cuyo director, Miguel Henrique Otero, también se pronunció sobre las amenazas de Chávez.
Encubrir la crisis En su opinión, las últimas acciones del Gobierno contra la oposición obedecen a un plan para lograr debilitarla mientras llegan los efectos de la crisis económica y coincidió con el alcalde de Caracas en que la intención oficial es criminalizar a la oposición y la disidencia. "Hay un crecimiento en la criminalización de la disidencia, la crisis económica el Gobierno no la va a poder contener, porque ha engañado a la gente con que la crisis no va a pegar en Venezuela, ellos saben lo que les viene, la crisis le va a pegar muy fuerte", lamentó Henrique Otero. Respecto al cierre de Globovisión, recordó que Chávez determinó el cese de las emisiones y dudó de que realmente fuese a ejecutar su plan ya que se "trata de una amenaza increible".
Ledezma aseguró que el mandatario criminaliza a quienes discrepan con el Gobierno socialista y recordó que "el pasado 23 de noviembre se demostró que también se pueden vencer los abusos y el autoritarismo"
Ledezma recordó a Chávez que mientras siga vigente la Constitución Nacional existirá la propiedad privada y lamentó que, a pesar de las promesas de ayuda con los más desfavorecidos y en contra de la propiedad privada, el líder de la revolución bolivariana ha regalado millones de dólares mientras hospitales y escuelas permanecen en nefastas condiciones.
Amenazas Durante la parte final de su programa dominical 'Aló, Presidente', Chávez advirtió a los dueños de los medios privados que se alinean con la oposición y "utilizan sus empresas de comunicación para incitar al odio, la división y la desobediencia de las leyes y del Gobierno Nacional", de que ya no tolerará más esta "situación conspiradora" y les exhortó a no seguir creyendo que son intocables pues pueden llevarse una "sorpresita".
"Una cosa es la critica y otra la conspiración, y retando al Estado, además, diciendo que nadie se puede meter con ellos (. . . )", explicó, quien mirando directamente a la cámara, dirigió una seria advertencia a estos sectores empresariales de la comunicación que, asegura, apoyaron el golpe de Estado: "pónganse a creer en cuentos de camino. Burgueses pitiyanquis, pónganse a creer que yo no me atrevo", asestó.
"La usurpación de funciones por los medios de comunicación que funcionan como partidos políticos y lo niegan, que operan como grupos de presión y lo niegan, cuyas informaciones y líneas editoriales no provienen de los que trabajan en ellos, es decir, los periodistas, sino de sus dueños, una individualidad, una familia o un grupo económico, no puede aceptarse", señaló Chávez durante su programa celebrado en Barinas, en la zona centro occidental de Venezuela