Así lo ha manifestado, en rueda de prensa, el presidente del Foro Español de la Familia en Castilla y León, Rafael López Carrillo, quien ha convocado a los ciudadanos de Castilla y León a la concentración, a la que "se prevé que asistan cerca de un millón y medio de personas".
Bajo el lema de "Cada vida importa", los manifestantes "mostrarán el rechazo a la ley y convertirán a la ciudad en capital de la vida", ha precisado el presidente, que además ha anunciado que desde Valladolid saldrán "entre cuarenta y cincuenta autocares".
López ha explicado que la nueva legislación supondrá "dejar a los no nacidos sin cobertura legal ni jurídica" y ha pedido que la vida sea protegida "desde el momento de la concepción".
Concienciar a la sociedad del apoyo a la mujer embarazada es otra de las reivindicaciones que ha señalado la representante de la Red Madre, Chari Bachiller, mientras que la portavoz de la Asociación Cultura de la Vida, Lourdes Rivero, ha insistido en que el aborto "no es un tema religioso ni político, sino la defensa del derecho a vivir".
La Coordinadora por la Vida y la Mujer ha propuesto que se tomen "medidas humanistas" como la protección jurídica al no nacido, preservar el derecho a la maternidad, facilitar la adopción nacional y la protección de la objeción de conciencia de los profesionales de la salud.
El manifiesto de la convocatoria a la concentración denuncia que el Gobierno central pretende modificar la vigente legislación para "despenalizar totalmente el aborto" y "privar a la mujer de su derecho a la maternidad".
En este sentido, las asociaciones convocantes piden medidas como la retirada del anteproyecto de la ley y la promoción de una red solidaria de apoyo a las embarazadas.
La nueva legislación prevé el aborto libre hasta la decimocuarta semana de gestación y hasta la vigésimo segunda en caso de riesgo de la vida o salud de la mujer o graves anomalías en el feto